Alcmeón – Revista Argentina de Clínica Neuropsiquiátrica – Los movimientos oculares en la práctica neuropsiquiátrica

 

2- Fisiología de los movimientos oculares

El único propósito de los movimientos oculares (MO) es maximizar la visión en la fóvea por un movimiento rápido (sacudida) y estabilizar las imágenes en la retina por movimientos lentos de seguimiento. Dado que las imágenes del mundo visual se desvanecerían en la retina con cada movimiento de la cabeza, la visión se haría borrosa y el reconocimiento de los objetos sería imposible de no mediar los MO. Los MO se clasifican en: movimientos de fijación, sacudidas, fase rápida del nistagmo, movimientos de persecución, movimientos vestibulares, nistagmus OK y movimientos de vergencia(10).

Movemos los ojos con todo el cerebro, afirman Pasik y Pasik(11), concepto que no pone en discusión la supremacía ya comentada de los sectores frontal y occipital.

Además intervienen los ganglios basales, el cerebelo, el tallo cerebral y los nervios oculomotores, como se ha visto en la sección precedente.

Movimientos de fijación

El mecanismo de la fijación visual consta de: a) desviaciones lentas, b) temblores de fijación, a razón de 5 por seg. aproximadamente y c) movimientos irregulares (flicks), entre 5 y 60 por min. Si la exposición de la imagen dura menos de 0.10 seg. se hace necesario mover los ojos para poder verla(12). Las áreas frontales suministrarían un flujo tónico a los núcleos oculomotores durante los movimientos de fijación visual(13). La fijación puede iniciarse voluntariamente y proseguir luego con movimientos automáticos. Globalmente hablando, los movimientos de fijación, fusión, persecución, atracción, acomodación y convergencia se relacionan con las áreas occipitales del cerebro.

Sacudidas

Son MO rápidos realizados durante la refijación voluntaria o refleja a estímulos auditivos o visuales. Cambian la línea de la mirada y la dirigen a un nuevo objeto de interés.

La unidad de movimiento del sistema OM (oculomotor) es la microsacudida, temblor fisiológico que describe 3 seg. de arco hasta 150 veces por seg. impidiendo la fatiga de la neurona retiniana y recentrando la imagen sobre una zona central electiva de unos 6 minutos de arco. Sobreimpuestas a este mecanismo se encuentran las sacudidas que
transladan la fovea a diferentes puntos del campo visual, las que describen un movimiento horizontal, vertical u oblicuo de 4 minutos a 15º de trayectoria a una velocidad aproximada de 500 grados/seg durante aproximadamente 40 mseg. Comienzan con una fuerte carga de impulsos en el músculo agonista con pausa del antagonista y terminan por invertir este ritmo. La mayor parte de las veces las sacudidas sobrepasan el blanco retornando con movimientos rápidos, o con derivas (glissade) de 5 a 20 minutos de arco de amplitud y 4 minutos por seg. de velocidad. Estos deslizamientos tienen un tiempo de activación 10 veces mayor que las sacudidas, las que para una amplitud de 10º se exceden en 0.25º respecto al blanco final(14).